miércoles, 23 de noviembre de 2016

Miguel se rapa

Miguel se rapa
Miguel se rapa
A las cuatro menos cinco de la mañana Miguel, sólo en el jardín, mira un rato el TE QUIERO que ha escrito Beatriz con piedrecitas. Luego entra en la casa y recoge un poco.
Mientras Miguel recoge los restos de la fiesta, los demás siguen dormidos.
Finalmente, comprendemos por qué Miguel se ha quedado el último despierto: tiene que hacerse algo en el peluquín: se lo quita con el dramatismo al que estamos acostumbrados y luego se pasa por la calva papel de ese transparente. Después, coge una maquinilla eléctrica y empieza a raparse el parietal. Un poco a lo bruto y demasiado corto. Entonces el realizador se teme que se esté rapando la cabeza así que corta al dormitorio y veremos el resultado en la casa y el vídeo del hecho en sí el jueves seguramente.
A las 4:30 de la mañana todos dormidos. Sin noticias de Miguel.



Bea a Rodri: ... me pones freno sin cortarme las alas...

Bea y Rodri cita en el apartamento
Bea y Rodri durante su cita en el apartamento 

La cita de Bea y Rodrigo en el apartamento por fin ha llegado, llevan todo el día nerviosos.
Les han dejado un montón de comida, una botella de champagne y han decorado un poquito la casa. 
La pareja brinda por ellos. Rodrigo está encantado de estar ahí: "¿nos podemos quedar aquí hasta el final? Que los vayan expulsando y nosotros aquí", propone. Bea no puede parar de reír, está bastante nerviosilla. 
Rodri se sienta a su lado... 
Bea aprovecha para ponerse seria con él:
 "te quiero decir que me haces sentir especial, me haces mejor persona, me pones freno sin contarme las alas. Eres diferente... y te quiero". 
Bea bebe el champagne a morro, como si estuviéramos de botellón: Rodri la ha retado y ella no se arruga. 
Entre ruido de platos, Rodri y Bea hablan de tonterías y ríen mientras hacen buena cuenta de la cena.
Cuando ya han terminado de cenar. "No sé si llamar a la hora sin cámaras o a una ambulancia", dice Rodri, que se ha puesto morado a comer, aunque hace insinuaciones de que ahora será esposado por Bea a la cama. 
En directo no vemos más, veremos imágenes el jueves, supongo.

Pero gracias a Bea, cuando vuelve a la casa y durante la fiesta, nos enteramos de que Rodrigo y Beatriz no han hecho nada y si tuviese que apostar, diría ha sido más incapacidad de Rodrigo que otra cosa. El caso es que Beatriz empieza a estar borracha también y suelta varios comentarios, como cantar una canción que dice: "ella sabe que está dura", o: "hay que echarle más cojones al asunto". Después de cada comentario, se acerca a Rodrigo a darle un beso. "Tú sigue vacilando con la historia. Han pasado horas y tú sigues. Te va a ser más difícil a ti que a mí. Hazme caso ya verás".
Todo resulta muy contradictorio. Ahora Rodrigo da a entender delante de Alain que ha sucedido algo digamos francés en la hora sin cámaras. Beatriz lo desmiente románticamente:
-De aquí a que te la coma, faltan meses.
-Te voy a decir una cosa -le dice Rodrigo a Alain inmediatamente después de que Beatriz haya dicho "de aquí a que te la coma faltan meses"-: es más romántica de lo que me esperaba.
Luego añade:
-Y es menos lanzada de lo que me esperaba.
Beatriz se va satisfecha y nos quedamos con Alain y Rodrigo jugando a la petanca.

Te quiero
TE QUIERO de Bea a Rodri

martes, 22 de noviembre de 2016

Alain a Meritxell: pero qué edad mental tienes


Meritxell entra en la tienda de campaña y ve que Alain está con el antifaz puesto y la almohada encima, así que, de pie encima de los colchones, grita:
-¡Adara!
Van a dormir esta noche juntos en la tienda de campaña por la prueba.
Al rato, Alain dice:
-Voy a dormir que ya estoy reventado -con la intención de que Meritxell no grite.
-Pues felicidades, qué quieres que te diga -contesta Meritxell 
-¡Adara!
Alain guarda silencio.
-¡Adara!, vuelve a gritar.
-Meritxell, quiero dormir -dice Alain. 
-No te pases, eh, ya te lo digo.
Alain guarda silencio. 
Adara no responde. Meritxell protesta porque tiene poco sitio en la tienda de campaña. 
Alain le dice, ya con cierta desesperación, que él tiene un brazo fuera, y que si quiere le cambia de sitio, que no quiere estar en mitad de una conversación con Adara si van a estar hablando toda la noche, que está destrozado y quiere dormir.
-¡Adara!, grita de nuevo Meritxell.
-Meri, de verdad.
-Encima que no sabes ni lo que quiero, que quiero un vaso de agua, que todavía no hemos hablado ni nada y ya estás protestando.
-Buenas noches.
-Buenas noches y déjame en paz.
-Claro que sí. Buenas noches.
-Buenas noches.
Y así hasta que los dos se quedan callados.
Por fin llega Adara a la llamada insistente de su amiga y se acuclilla en la entrada. Ahora Meritxell no habla, pretende que Adara le lea los labios.
-No quiero estar aquí -articula Meritxell con los labios.
Adara no lo entiende y Meritxell lo repite más despacio.
-No. Quiero. Estar. Aquí.
-¿Estás dormido, Alain? -dice Adara, que tampoco lo ha entendido más despacio.
-Ojalá. Buenas noches, Adara- contesta Alain resignado.
-Me está echando -dice Adara.
Luego Meritxell dice cosas a medias y que Adara entiende nada: "me ha hablado fatal, te lo juro". Luego articula:
-Dile a Miguel que venga y se quede aquí.
Adara lo entiende a la tercera.
-No se puede -dice Adara.
-Díselo -articula Meritxell .
Adara parece que va, pero vuelve y dice que se va a dormir. Meritxell le suplica pero Adara dice que no tiene nada que hacer aquí, que se aburre, que se va pero siguen así, con Adara acuclillada junto a Alain en la entrada de la tienda, y hablando con Meritxell que está detrás de Alain. De pronto, Adara tira de la manta de Alain y sale corriendo. Meritxell se ríe y Alain salta y:
-Deja de provocarme que no he hecho nada -dice Meritxell .
-Se huele a kilómetros -dice Alain.
-Encima copiándome las frases.
-Qué voy a copiar de ti?
-Déjame.
-Aburres.
-Tú sí que aburres.
-Me estoy cansando mucho.
-Pues no me nombres. O sea, a ver si me dejas.
-Tú me estás nombrando.
-¡Adara! Dile que yo no he hecho nada. Hay que saber antes de acusar.
-No ha hecho nada, de verdad -dice Adara fuera de plano.
-No digo nada de Adara , con Adara no va la cosa -dice Alain. 
-Eres un pesado.
-Que me dejes.
-Déjame tú.
Alain se queda callado. Adara dice algo fuera de plano. 
-No Adara. Contigo no va la cosa. Es que es un pesado y estoy aquí y no me apetece un mierda -dice Meritxell.
-Quiero dormir.-protesta Alain.
-Yo no he hecho nada, a ver si te enteras.
-Que me dejes dormir.
-Cállate la boca. No me nombres, déjame en paz.
-No me digas que me calle la boca. Háblame bien.
-No te estoy hablando mal. Además, Adara te ha hecho una broma tontísima.
-Sé que tú la animas. 
-Yo no la animo, ha sido ella sola ¿Verdad, Adara!
Meritxell sigue ella sola:
-Encima que yo no he hecho nada. Que ha sido Adara , que ni le ha salido la broma.
Al final Alain vuelve a contestar:
-Déjame dormir. Que siempre estás igual.
-Dile a Miguel que venga, que estoy muy incómoda. 
-Buenas noches.
-Qué pesao ¿Cállate? ¿Por qué sigues?
-Madura un poco.
-Ya estamos con el ataque gratuito de madurar. Antes de acusar pregunta, que yo no he hecho nada.
-Buenas noches.
-Estaba tranquila y me molestas.
-No te voy a contestar más.
-Tranquilo, que no necesito que me contestes.
-Buenas noches.
-Qué pesao, tia.
-Pesada tú.
-Déjame en paz, Alain.
-No te voy a contestar más. Madura un poco. 
-Adara, explícale que yo no he hecho nada. Que yo te he animado, dice, y encima se piensa que es el centro del mundo. Dile a Miguel que venga y se meta él que no quiero estar aquí. A parte de que es muy duro y tengo dolor de cervicales y tener que aguantar a alguien así... me siento como un pajarillo enjaulado. Esto parece una película.
-No se puede quedar Miguel -repite Adara. Luego dice:
-Me voy -y hace un ruido como de pedo con los labios. A Meritxell le hace mucha gracia y hace otro ruido de pedos. Intercambian unos cuantos ruidos de pedos, riéndose después de cada uno. 
-¿Pero qué edad mental tienes? -dice Alain-. ¿Pedos? ¿Qué va a ser luego, eruptos?
Meritxell se ríe tanto que se tapa la cara con las manos.
Adara se coloca detrás de la tienda y hace un ruido de erupto.
-¿No soy tan inmadura? Pues ahora con motivos.
Alain ya no responde. Al final, Adara se cansa:
-Por favor, quédate -pide Meritxell.
-Me voy. Me voy a echar crema y me voy a dormir.
-No me abandones ¿No te doy pena? -dice Meritxell lastimosamente.
Pues parece que a Adara no le da pena de su amiga cumple lo prometido, se va.
Meritxell y Alain se quedan solos. Meritxell parece que asume que esta noche va a dormir en el suelo y se pone a cantar:

Meritxell cantando los Lunnis
-Buenas noches, hasta mañana, los Lunnis y los niños, nos vamos a la cama. Nos vamos a la cama. Nos vamos a la cama. Nos  vamos a la cama. Hasta mañana. 
Mientras tanto, Miguel y Simona avanzan a gatas pegados a la pared del salón. Pretenden pasar por detrás del sofá azul, y recortar desde ahí hacia un lateral de la tienda de campaña sin que los vean. Adara contempla la escena desde la cocina. Llegan a la pista de baile y avanzan hasta las macetas con arbustos que están junto a la tienda. Una vez allí hacen cosas como dar golpecitos en la lona de la tienda o mover los arbustos. Meritxell se da cuenta de que hay alguien: pregunta, no contestan, sigue cantando. Al final todos se aburren y Simona y Miguel salen de su escondite. No les ha salido tan graciosa como pensaban y Adara también se acerca. Alain ya está hasta los cojones. Dice que muy bien la broma pero que a dormir. Entonces Adara se mosquea porque Alain tolera las bromas de sus amiguitos muy bien, pero si es ella la que hace la broma, pues muy mal. Alain, coge y dice que por favor, que quiere dormir. Pinky repite su argumento de las bromas otra vez. Alain sigue queriendo dormir. Quiere cortar el asunto rápido para que se vayan y parece que funciona. Desaparecen todos y se quedan en la tienda de campaña como al principio, Meritxell y Alain.

lunes, 21 de noviembre de 2016

Simona de Meritxell y Adara: no sé cómo pueden vivir rodeadas de mierda

Simona 

Simona se desahoga con Alain. Está harta de los ataques de Meritxell y Adara. Asegura que no va a permitir que la dejen de mentirosa y no soporta que las muchachas no hagan sus tareas: "No se cómo pueden vivir rodeadas de mierda...Solo piensan en haber que bromita hago para provocar a la gente...No te dejan hablar. No sé cómo tú tienes aguante. A mí cuando me gritan prefiero darme la vuelta porque me da dolor de cabeza...No quiero perder más el tiempo...y luego te hablan como si nada hubiera pasado ...ni un perdón". 
Simona también está harta de los celos de Meritxell: "No eres la propiedad privada de nadie. Parece que eres un jersey suyo...". Sin embargo, está dispuesta a mantener las distancias: "No quiero verla pasarlo mal...Si quieres te digo hola y punto". Alain le pide que no haga eso, que él no tiene un compromiso con nadie.

domingo, 20 de noviembre de 2016

Meritxell sobre Alain: le he perdido definitivamente

Meritxell hablando con Adara de Alain


Fiesta francesa. Alain coge dos copas en una mano, con la muñeca girada en ademán elegante y sirve champán, mientras las chicas le miran tan entusiasmadas como Simona. De donde deducimos que Meritxell estará que trina.
Rápidamente aparece Meritxell en la pista de baile y se lleva a Alain aparte, le hace un par de carantoñas y le libera, porque Alain está pero no está. Y vuelve a la pista con Simona del tirón. Bailan sueltos, pero a ratos agarrados. Meritxell vigila detrás de Alain, bailando con Adara.
Se masca la tensión.
Llega Miguel y enfría un poco la situación. 
Bailan. Cuando Alain baila con Adara, Meritxell aplaude y anima. Cuando baila con Simona ni aplaude ni nada.
Miguel, entonces propone presentar el Primer Certamen de Miss y Míster Francia Gran Hermano 17.
 Miss Francia Gran Hermano 17 es Beatriz. 
Con el Primer Certamen Míster Francia Gran Hermano 17 las chicas utilizan las típicas preguntas del certamen de belleza para hacerles a los chicos otras preguntas que les interesa a ellas más. Como cuando le toca a Rodrigo, las chicas le preguntan que qué significa estar enamorado. Rodrigo responde con una colección de frases hechas.
Sin embargo, Adara le dice a Beatriz:
-Me quedo muerta. Superbonito, tía. Y encima te miraba, tía. 
Con Alain más de lo mismo.
Al final, todas las preguntas se convierten en preguntas a pillar: ¿Sientes algo diferente por una chica de la casa que no sea amor pero que no sea amistad?
Alain responde que no. 
Adara lo vuelve a intentar: "No entiendo como ehhh puedes salvar a una persona de una nominación, no sé cómo la puedes salvar y que luego estéis separados... u otro tipo de cosas... ehhh... o sea ehhh... el que te importe una persona, Alain,  o sea, el movimiento se demuestra andando".
Alain es escurridizo para la respuesta y nos quedamos sin saberlo.
Pero entonces Alain le da un KO a Meritxell y le suelta un discurso que se resume en : "nunca en la vida nos vamos a complementar. Jamás te voy a poder hacer feliz a ti y tú a mí tampoco". Meritxell se mosquea. 
Alain se hace el tonto y finge que no sabe que a Meritxell le gusta y Meri también se hace la tonta y se comporta como si tuviese algún derecho sobre Alain porque le ha hecho tres pajas (cosa que Alain resume muy bien: porque nos hayamos dado unos besos no tenemos que casarnos) de manera que cada vez que Alain se acerca a Simona Meritxell monta un pollo absolutamente desmedido (que ella misma resume muy bien: verte bailar y besarte con otras tías no lo aguanta nadie).
Meritxell se envuelve en una manta y se va al confesionario. Adara quiere dar su punto de vista. Vuelve a formular la pregunta y Alain da dos respuestas muy buenas que hacen que Adara no le dé mucho la brasa: que no se va a casar por tres pajas. Y entonces Adara le informa a Alain de que si sabe que a Meritxell le gusta, tiene que tener cuidado con los sentimientos de esta, pero Alain responde: ¿y qué hago? ¿Me quedo todo el puto día solo en el cuarto? 
Meritxell no ha tenido suerte en el confesionario y vuelve envuelta en la manta hasta el dormitorio: "no pienso llorar, por mi familia. Ni una lágrima. Ni una lágrima.Ni una por mi padre, porque la impotencia que tiene que estar pasando al verme así es increíble, tía. Porque la que ha entrado aquí soy yo, no mi padre. Estoy harta, tía, harta tía .Que soy persona ¿vale? Que antes que todo esto, soy persona, y estoy hasta los cojones".
En el sofá azul, Rodrigo y Alain hablan de la discusión.
La justificación pajística de Alain es que la provocó Meritxell. Dice también que pensó que igual estaba siendo prejuicioso con respecto a Meritxell por la edad, por la personalidad, etc., y se dejó llevar (pajear) por eso. Para ver qué pasaba. Pero luego no. Rodrigo mantiene que Alain tiene que tener más cuidado con los sentimientos de Meritxell.
Mientras Meri: Es que me gusta, ese es el problema tía, y cuando te besas con alguien te gusta más, tía. Y sigue: "muy jodida", "mucho", "harta, tía, mucho". Adara que parece que no sabe muy bien qué aconsejar le dice a su amiga:
-¿Quieres ir a hablar con el Súper?
-No quiero hacer nada, tía. Estoy muy jodida.
-Ya... Pero ella te tranquiliza...
-Tía, es que me ha dejado por mentirosa y nadie sabe la situación -se refiere a que cree que nadie sabe que le ha hecho tres pajas y a que cree que si todo el mundo supiese que le ha hecho tres pajas, todos compartirían, como Rodrigo, que Alain tiene que tener cuidado con sus sentimientos.
-Yo es que cuando voy al confesionario me tranquilizo muchísimo. Muchísimo...
Pero Meritxell ya lo da todo por perdido: "le he perdido definitivamente, tía”.

jueves, 17 de noviembre de 2016

Meritxell le cuenta a Alain qué le pasa con Simona

Meritxell hablando 
Alain le pregunta a Meritxell por el asunto de Simona. Meri explica que Simona la provoca y el resto no lo ve, pero ella, como es el objeto de la provocación, pues sí se percata de su comportamiento. 
Meritxell cuenta el primera caso, el de la limpieza de los baños y la cocina, en los que la rumana se puso a hacer la tarea de Meri sin preguntar, solo por dejarla mal. También se puso a fregar platos diciendo "claro, como aquí no friegan los platos". 
Alain le pide que continúe contando esas provocaciones. 
Meri va con la segunda: el día que por la mañana le dijo que que bonitas las zapatillas, luego ella le preguntó dónde está Clara y ella no se lo quería decir hasta que saltó. 
Además, afirma que mete a Alain en las conversaciones para provocarla. "Es muy lista, viene de fuera y ha visto vídeos, y va a por Adara y a por mí". Asegura.
Por si fuera poco, anoche se acercaba a Alain a tocarle riéndose y diciendo que "huy como me vea mi novio"... Meri dice que está todo el día sobándole, y que cuando dijo cómo era su prototipio dijo "Alain. ¡A esa tía la han metido para joderme a mí!".
Vaya que ella tiene el monopolio de sobar a Alain.
Alain dice que no, que la han metido porque había poca gente. 
Meri dice que no, que no es tonta, y que la han metido de fuera para crear conflicto. 
Meri sigue en su bucle anti-Simona, repasando diálogos y situaciones que han tenido entre las dos. A pesar de que tenga novio, nos dice, no se corta un pelo a la hora de provocar a Meri, besos incluidos. "El segundo día ya me dejo caer que sabe cosas. De nosotros", dice la chica a su amiga. 
Alain escucha en silencio hasta que por fin dice: "a mí también me sorprendió esa manera de bailar, era como una gogo, pero... a lo mejor es que ella baila así".
A Meri no le hace mucha gracia la actitud del francés, al que acusa de no enterarse de nada. Pero ella no es tonta y sabe todo el plan de Simona, que es provocarla. Alain dice que su reacción de ayer fue exagerada. Meri dice que esa opinión solo la tiene porque no sabe lo que pasa entre ellos. 
Volviendo al tema de la limpieza, Alain le dice que "ayer el baño estaba súper sucio, creo que da mucho asco, y ella se puso a hacerlo y lleva toda la razón del mundo". 
"Creo que le tocaba a Miguel", puntualiza Meri, para después insistir en que Alain nunca la cree y siempre se pone del lado de la otra persona.
Alain se ríe de las reacciones de Meritxell. Ella sigue y sigue con lo mismo: que el baile de Simona era una insinuación a Alain, que eso las mujeres se dan cuenta y tal y tal. 
Alain dice que él no lo vio así, y que tampoco es normal que reaccionara de una manera tan radical: hubiera sido mejor cogerla de la mano y hablar con ella en lugar de montar una discusión que afecta a toda la casa. 
"Por mi culpa no es. Es por sus provocaciones", insiste la catalana. 
Alain le insiste: pon de tu parte para mejorar la convivencia. Además, cree que cuando habla con Adara "alimentáis vuestro odio contra ella y hacéis una bola de una tontería". Por ejemplo: http://viendogh.blogspot.com/2016/11/simona-contra-adara-y-meritxell.html
Meri defiende a su amiga: "me comprende muy bien en algunas cosas. No es plato de buen gusto que está ahí insinuándose". Su argumento es que "las acciones tienen consecuencias, y si tú me provocas, tienes que aceptar la consecuencia de que te voy a decir lo que pienso". 
Meri dice que Simona "le saca pullitas de fuera. No es tonta, sabe cosas de fuera". 
Alain le pregunta el qué exactamente, pero Meri no quiere contárselas.... es algo vago. "Ella ha visto conversaciones que hemos tenido tú y yo, ha visto que hemos discutido... y cuando discuto con ella me dice las cosas indirectamente. Es como que se reconforta cuando nosotros discutimos. Se alegra de que esté mal por discutir contigo. Si ve que hemoe peleado, va directa a tumbarse contigo".

miércoles, 16 de noviembre de 2016

Meritxell a Simona: No insultes


Empieza el día y Simona y Alain son los primeros en levantarse. Alain a la ducha, Simona se acerca a la cocina. Hay restos de la fiesta de la noche y cacharrería sucia desbordando la pila. Simona ni se altera, ignora la montaña de basura y se prepara un té. Se atusa el pelo en el reflejo del micro mientras el agua se calienta.
El Súper da las instrucciones diarias y Simona baja los estores y empieza a recoger. Está ya fregando cuando Adara asoma por la cocina, va a cambiar las pilas y se va por el otro lado. Simona se gira a mirar cuando Adara aparece, Adara calla, Simona calla y el ignorarse se hace mutuo. 
Clara es la siguiente.
Meritxell en tercer lugar. Ignora.
Simona sigue fregando y pregunta si ayer a la hora de comer se fregaron los platos. Clara menea la cabeza de izquierda a derecha. "No tienes por qué fregarlo tú todo", añade. Ambas saben que fregar es la tarea que comparten Adara y Simona.
Meritxell y Adara desayunan en la mesa. Simona sigue con el fregado y Clara decide ayudarla. Le va acercando tazones sucios y le extiende un delantal que usan para secar. Le repite que no tiene por qué hacerlo. Simona que si no, no se hace. 
Y Adara se da por aludida y salta.
Dice que la tarea es de las dos (de Adara y Simona) y que ella ya se hizo la cocina ayer. Simona reclama que no fregó después de comer. Adara contesta que ella fue la anterior en hacerlo, de modo que la comida le tocaba a Simona.

Adara y Meritxell discutiendo por la mañana con Miguel en medio
Miguel protesta, dice que no tiene ganas de esto a primera hora. Adara entra a gritar que Miguel no se meta y como Miguel sale, Simona introduce baños. 
Y Merixtell que es la encargada de limpiar  el baño, salta también.
Ambas, Meritxell y Adara, hacen que Miguel pregunte de nuevo por qué gritan, si no lo pueden hablar. 
Simona le contesta: "porque son unas maleducadas". 
"No insultes", reclama Meritxell. Y le pide a Adara que no grite, cree que Simona busca provocarla para que se ponga a gritar. Pero Adara no puede.
Así que gritos. 
Miguel ya no está. Abandona.
Adara pide, aún a gritos, a Simona que le deje en paz y le acusa de provocarla. La respuesta para todo de Simona es que hace lo que le da la gana. Friega si le da la gana, se queja si le da la gana o hace los baños si le da la gana. Ante esto, Adara decide marcharse y Simona la increpa: 
"Si, eso, vete mejor a que te dé el aire". "¡Que te vayas a la porra! ¡Guaaaapa!", se gira Adara rabiosa.
"¡Gracias!", contesta Simona riendo. Ya alejándose, Adara le dedica un último "sinvergüenza" y un "yoquesé", que es nuevo en su vocabulario de Gran Hermano.
Al final Meritxell y Adara abandonan y se van al vestidor.
Meritxell sigue diciendo que Simona las provoca y que sabe como hacerlo. Aconseja a Adara que no grite, pero Adara no lo ve fácil porque le "saca de quicio" y la está "calentando".

Por su parte, Alain aparece a desayunar. "Menuda fregada te has pegado", le dice a Simona. Simona lo toma a pregunta y le cuenta la discusión a Alain. "Se ponen a chillar aquí y les molesta que les llame maleducadas. Pero si chillan y faltan al respeto... es lo que hay". 

El Súper les avisa que se tienen que cambiar para hacer una cosita y cuando Simona y Alain están en el dormitorio, Alain vuelve a preguntar qué ha pasado. "Pues que han dormido mal", resuelve Simona. Alain quiere saber más. "Pues que dicen que hago las tareas de los demás y que no hago las mías". Alain sigue pensando que se puede hablar y se lo dice a Simona. Pero Simona no lo ve tan posible: "si no se puede hablar con ellas, sólo gritar". Dice que ya ha intentado acercarse a ellas en su momento y no se puede. "Yo voy a pasar, no se acaba el mundo por eso".

Simona contra Adara y Meritxell o viceversa

Simona bailando en la fiesta
Martes noche y en la casa de Gran Hermano tienen fiesta.
Simona está sola en la pista de baile, llega Alain la agarra y bailan un momento. Inmediatamente, Meritxell se mosquea. "Flipa como baila, tía", dice Meri de Simona. Alain pasa por la zona en la que Meritxell está sentada y le dice algo en tono de broma pero Meritxell le dice que mejor se vuelva para la pista. Alain dice que cada día está más rara y en ese momento, creo que haciéndose el tonto un poco.
Ahora Meritxell y Adara comentan la jugada en el sofá azul. Lo primero que escucho es a Meri decir: Yo no es por meter mierda, pero si Pol está aquí dentro te hace algo así para joderte, tía.
Llega Beatriz y Meritxell comenta la jugada con ella también. En boca de Meritxell la historia va creciendo como una bola de nieve y empieza porque la nueva la está provocando para darle celos, sigue porque ella ya sabía que alguna bronca iban a tener esta noche y termina porque está convencida de que han metido a Simona sólo para darle celos. 
Pero la cosa no queda ahí. Meritxell se mosquea aún más porque parece ser que Simona la proba bailando y riéndosele y Adara también se mosquea por su amiga:
-Me haces eso a mí y se quema la casa -dice Adara.
Simona a su bola:
-Fuego, fuego -dice, sin dejar de bailar.
-Tu metes mierda por todos lados
-Soy una metemierda -dice Simona, que está consiguiendo sacar de quicio a Meritxell:
-De verdad, hija, estás haciendo el ridículo. Que no tienes 15 años para estar todo el día provocando. Tu ríete, ríete...
Simona:
-¿Es que tengo que pedir permiso para reirme o qué?
-No me hagas repetírtelo otra vez -dice Adara. - Voy a tener que pedir otra vez la grabadora -sigue. -Te he dicho muchas veces que no te rías de lo que quieras pero que no te rías de mí. Que no te tengo que repetir las cosas 15 veces.
-Pues entonces te callas la boca -dice Simona.
-Que estás provocando.
-Provocaciooooooon -dice Simona y se ríe y sigue bailando.
Adara y Meritxell se callan. Simona hace un gesto como de imitar a Meritxell o ella se lo toma así (probablemente cambiarse de orientación la melena) porque Meritxell dice:
-No me intentes imitar que como yo no hay dos -dice Meritxell muy chula.
-Como yo no hay dos -imita Simona. Meritxell:
-Intenta aprender la canción de: "Una en un millón". Esa soy yo -dice, completamente en serio. 
Simona sigue bailando, intentando molestar. Meritxell dice:
-Menos mal que tiene pareja, pobrecillo su novio.
-Da igual que tenga novio, lo que no puede es jugar a ese juego sucio de hacer daño, de provocar continuamente, de picar, de sacarte de tus casillas. 
Simona baila y se ríe. Y ahora es Meritxell la que dice cosas como:
-Qué triste la gente sin argumentos, qué triste la gente sin cerebro.
-Da igual, vámonos anda -dice Adara.

Adara y Meritxell  se va a hablar al vestidor de la bronca que acaban de tener con Simona. Reducen la situación a que Simona no sólo ha venido a provocar, si no que, con tal de llamar la atención le da igual hacer daño a otras personas (supongo que se refieren a que como Meritxell se comporta como la novia de Alain, pues le parece superdoloroso que esté con otras chicas). 

Y mientras, en el sofá azul, Beatriz le está contando a Simona que se molestó cuando, el primer día, le dio un beso a Rodrigo, que tuvo que contar hasta 20. Entonces coge Simona y contesta que:
-Eso está muy bien. Es que estás madurando.
El caso es que, justo en ese momento, están pasando Adara y Meritxell , de manera que Adara se mete en la conversación y le reclama a Simona por su falta de madurez: como le puedes pedir a una persona que se calle lo que le hace daño. Simona repone que ella pasa de "discutir por tonterías". Meritxell se pone a gritar que le están faltando al respeto, Simona se pone a gritar lo mismo, se levanta y se va desfilando como una modelo.
Meritxell y Adara se quedan perplejas. Gritan.
Simone vuelve desfilando.
-Que vas provocando en lugar de venir a hablar conmigo las cosas -dice Meritxell .
-¿Y tu conmigo? -dice Simona, sin dejar de sonreír y de bailar.
Adara trata de gritar algo, pero Simona la interrumpe:
-Nadie está sorda, Adara -dice, y se va.
-¿Pero por qué te vas? Te vas porque no quieres dar la cara.
-Relájate -dice Simona desde lejos.
-Relájate tú.
Simona se relaja. Dice:
-Te va a doler la cabeza de tanto estrés -y se ríe.
-Es continuada la provocación de esta chica, solo dice mentiras, tira la piedra y esconde la mano, provocación tras provocación, tía -empieza Meritxell , y sigue así un buen rato. Simona escucha sonriendo y bailando y cuando termina, le dice:
-¿Quieres un aplauso, Meritxell ? -dice, y aplaude.

Meritxell coge una manta y se va al confesionario. Simona desfila por la casa riéndose y haciendo poses. Adara va hacia la cocina y otra vez con Simona. Adara quiere que le diga las continuas provocaciones que dice Simona que sufre a manos de Meri y ella, pero Simona no piensa entrar a discutir. Así que Simona pone por ejemplo que el otro día pasó por nosedonde y justo en ese momento Adara y Meritxell se rieron de ella. 
-Es por una cosa de Beatriz que por supuesto tú no sabes. Nos reíamos de eso, no de ti. Que hay que creerse el centro del mundo para pensarse que se ríen de ti. Yo no te juzgo a ti -dice Adara , levantando la voz.
-Me acabas de juzgar.
-¿En qué?
-Diciendo que me creo el centro del mundo. 
Adara titubea, así que levanta más la voz, así que Simona se va, otra vez desfilando como una modelo. Adara grita a su espalda que no sabe argumentar, que no da la cara, pero no la persigue. Simona levanta la mano y hace el gesto internacional de hablar, que en este contexto viene a querer decir: habla trucho que no te escucho.
Meritxell llega chillando porque ha oido a Miguel que insiste en decir que todos son libres.
Tú eres libre. Tú eres libre. Y tú. Alain también. Lo que Meri chilla una y otra vez son distintas versiones de que Simona la está provocando.
-Venga, haz un monólogo -dice Simona.
A Meritxell no le gusta que la interrumpan cuando argumenta, así que se mosquea
-Esta chica sabe perfectamente lo que hace, viene de fuera y ha visto vídeos y sabe dónde duele -dice Meri , e insinúa que Simona se arrima dónde le conviene. Interviene Clara para decir que si eso fuese así, se hubiese arrimado a Adara , que evidentemente es la favorita.
-Volverás el jueves tranquilamente -remata Clara. 
Meritxell y Adara piensan como seguir con la bronca mientras Simona sigue bailando y poniendo caras. A Meritxell se le ocurre que:
-Clara da la cara. Esa es la diferencia.
Adara está de acuerdo.
-Esta chica no da la cara, nadie te va a dar la razón cuando la busques. Mírala, haciendo tonterías -dice Meritxell, mientras Simone baila sonriendo, mirándola y cambiándose de orientación la melena de este a oeste.
-Sabes mucho, se te ve a leguas, a kilómetros, que es increible ya tía -continúa Meritxell.
-Hablas con una persona y se pone a bailar -fipa Adara .
-Porque chilláis -dice Simona desde la pista.
-Sacas de quicio a todos -dice Adara , aunque las únicas que parecen fuera de quicio son ella y Meritxell.
Dice:
-Tus provocaciones se ven.
Meritxell se enzarza en otro mongólogo sobre las provocaciones. Cuando termina, Simone le vuelve a decir que si quiere un aplauso.
Parece que todo se va calmando y Clara ahora da consejos sin que Simona se los pida y que se parecen más a instrucciones que a consejos. Para Clara, la edad es fundamental: Simona, al ser mayor que Meritxell , tiene que darse cuenta de se comporta como una adolescente con un novio imaginario. Todos en general parecen un poco descolocados por el comportamiento de Simona, pero como por una vez ha sido al revés y alguien ha conseguido descolocar a Adara (Meritxell es más fácil de descolocar) y a pesar de los repetidos consejos para que Simona mida un poco más, que es la nueva, en realidad parece más una celebración que otra cosa. 

Clara a Miguel: No te voy a regalar los oídos, habéis sido un equipo demierda...

Miguel, Bea, Adara y Meritxell en la prueba

Han perdido la prueba. Han tenido una penalización de un 26% por retrasos o saltarse las reglas. Por otro lado, han recibido un 65% de like, así que nada. Prueba no superada. 
Eso sí: los ganadores por pruebas ha sido el equipo Rojo, el de Bea, Adara, Miguel y Meritxell, que tienen como recompensa un montón de chucherías. No se lo creen. 

"Esta es la cruda realidad de Gran Hermano. Sabéis que han votado por preferencia de personajes en Gran Hermano, porque han hecho una mierda de prueba", dice Clara que parece que no recuerda que ellos también han ganado otro día. 
Rodrigo: "yo creo que el domingo votaron los colaboradores, y hoy ha sido la gente". Intentando comprender la victoria del otro equipo.
Clara espera que esto no sirva para que haya quien se crezca y lo use para atacarles. 
El súper les deja compartir los dulces con el resto, así que les dejan que el resto también coman chuches. Rodrigo dice que no se lo merecen y Adara y Bea les recuerdan que el otro día ganaron ellos.  
Alain, Miguel y Clara se van al club a cenar. Clara se teme que "otra vez empezarán las movidas por la crema de cacao y eso", viendo que no tendrán presupuesto al perder la prueba.
Miguel reconoce que para su equipo "vosotros fuistes mejores". 
"No te creas que has ganado por ser mejor, habéis sido una mierda de equipo", dice Clara. 
Miguel dice "no te pongas así". 
Clara se lo deja claro: "hace un rato estabas quejándote de ellas, las únicas que habéis puesto ganas sois tú y Bea, las otras han estado ahí quejándose, pero como esto funciona, adelante". Miguel dice que su obra tampoco ha estado mal, aunque le gustó más la otra.
Clara insiste: "no te voy a regar los oídos, habéis sido una mierda de equipo, unas riéndose, Bea ha pasado..."
Miguel defiende a su grupo: "había un problema de actidud, pero no somos una mierda". 
Clara afirma que "yo tengo buen perder. No soy competitiva en ese aspecto". Miguel se ríe. Clara afirma que es consciente de la que viene ahora. 
Miguel se calla.
Al poco, Clara, visiblemente mosqueada, se vuelve a enfadar. No le gusta la cara de Miguel, y cree que se ha enfadado con ella porque le diga la verdad, y que a ella le da igual ganar o no ganar. 
Miguel cree que es una falta de educación "es que imagínate yo que te digo que "sois una mierda de equipo". Clara quiere terminar el tema con un "se acabó la discusión". 
Pero entonces Miguel se queja de que él estaba contento por ganar y tener las chuches y Clara le corta el rollo. "Yo sabía que iba a perder la prueba, pero por mi parte, estoy orgulloso. No tengo ni idea de informática y me he currado un guión de cinco páginas. El resto del equipo ha pasado, pero eso ya lo digo, yo hablo de mi parte. Vosotros os lo habéis currado más. Pero por mi parte, mi trabajo está bien hecho". 

Clara está empeñada en que esto ha sido una competición entre Adara y ella. Miguel le dice que "para ti todo es competición. Rebeca contra mí, nosequien contra mí". 
"Cállate Miguel. Esta es una nominación muy esperada desde fuera. Está claro que esto es ella contra yo, por eso hay esos porcentajes, uno de 1,8%. Alain ha salido porque tenía que salir alguien", le cuenta Clara, pensando que esta expulsión va a ser un cara a cara entre ella y Adara.
Y Clara confiesa que "ya tengo pensado que voy a decir desde el plató. Es la nominación más esperada, no hemos salido juntos nunca. Somos las grandes rivales desde el principio del programa".
Entonces Miguel, después de la conversación con Clara va a Adara a decir que aunque hayan ganado, no lo merecían y que tenían que haber ganado el grupo de Clara.
"Pero por qué echas nuestro trabajo por tierra... tiras piedras contra tu propio tejado", dice Adara. 
Miguel le dice "no hemos tenido actitud de equipo. Yo he escrito hoy 5 hojas".
"No, si ya he visto como ibas por ahí enseñándola. Hoy era tu labor escribirla, y los demás hemos estado dando ideas", le replica Adara. 
Llega Meri, y Miguel dice que simplemente le parecía más gracioso el diálogo de los otros. 
Meri y Bea flipan porque antes decía que no merecían ganar (según ellas). 
"Me parece muy feo que estés hablando por la espalda, en la habitación enseñando las hojas que has hecho, luego en el club..." le echa en cara Adara a Miguel y éste le contesta que él no habla por las espaldas y que habla con ellos. Adara no está de acuerdo: "has estado diciendo al otro grupo si hacíamos una cosa o la otra, yo no tengo necesidad de hacer eso, no me dedico a controlar tu tarea. Y podría haberlo hecho". 
"Sí, en la ejecución sí pero en la actitud no", dice Miguel. 
Adara insiste en que tendría que alegrarse por su grupo, "siento mucho que no te alegres porque la gente vote a este grupo". 
Miguel agradece a  todos los que le han votado, y después pregunta: "¿no te quedaste sorprendida porque ganáramos?". 
Meri y Adara dicen rápidamente que "nos ha sorprendido porque el otro día ganaron ellos". 
Adara dice que hay diferencia entre decir que te gusta el trabajo del otro a decir que tenían que ganar el otro grupo. Los dos se acusan de manipular y buscar discusiones.